El pasado diez de abril, El País publicaba un artículo muy interesante sobre el futuro de la arquitectura. En el titular ya se plateaba la idea del mismo “¿La nueva arquitectura debe ser rápida, flexible y ampliable?”

En esta ocasión, servía de ejemplo un edificio en la Universidad San Jorge de Zaragoza. A groso modo, el objetivo de esta construcción era crear un módulo y posteriormente “Serán módulos iguales los que se sumen para dar como resultado un edificio flexible y con capacidad de crecer”. Y hasta aquí todo bien.

No obstante, hay muchos matices sobre los que trabajar. Por un lado, esta clase de arquitectura “rápida, flexible y ampliable”, puede ser la respuesta a algunos problemas que se plantean algunas instituciones en la actualidad. El caso de la universidad es el más obvio.

A falta de recursos, la posibilidad de ampliar a base de módulo homogéneos; es una alternativa muy válida a la hora de poder gestionar recursos. En este sentido, si el edificio es funcional y, adicionalmente, reduce el gasto público; todos contentos.

Arquitectura y posiblidades

Sin embargo, esta es solo una de las soluciones que la arquitectura plantea. Perder la originalidad, la personalización y “esa lucha” por crear el edificio más bello, o el reto arquitectónico más amplio, en lugar de ampliar vía módulos, es un error de base.

La arquitectura no deja de ser un arte, y como tal, ha de desarrollarse en diferentes vías y proponer diferentes resultados para un mismo objetivo; ejemplo de ello son los concursos. Así, esta clase de soluciones que se plantean, son muy interesantes y deben tomarse en cuenta. Pero no se puede reducir todo un campo a este aspecto. Además, llevar a la arquitectura del futuro solo ha ese punto, sería aburrido.

edificio CabrielVivamos en un mundo de posibilidades o ¿por qué no? De colores. Cada día más cosas son posibles, gracias a los avances en tecnología e ingeniería. Debemos asumir la creatividad como parte esencial del trabajo, sin olvidarnos de la funcionalidad y el ejercicio práctico. En cualquier caso, y es lo verdaderamente importante, ambas formas pueden convivir en el futuro, complementándose mutuamente.

En el Estudio de Arquitectura de Manuel Navarro, apostamos por Málaga y la arquitectura. La innovación, la sostenibilidad y la planificación deben ser los pilares fundamentales que nos guíen. Recuerda, nos encontramos en Calle Victoria, 7, 2 i, 29012 Málaga. Te esperamos