La mediación de conflictos, una alternativa a los juicios
La mediación de conflictos se ha convertido en los últimos tiempos en la mejor forma de solucionar problemas sin tener que llegar a un juzgado. Es un proceso voluntario, en el cual de una forma sencilla y sin formalismos, dos o más partes involucradas en un conflicto trabajan con un profesional imparcial, el mediador, para generar sus propias soluciones y así resolver sus diferencias.
A diferencia de un juez o un árbitro, cuyas decisiones obligan a las partes, e implican en la mayor parte de los casos que una parte gana y la otra pierde, la mediación de conflictos busca obtener una solución válida para ambas partes.
La mediación
Es una forma flexible de resolución de conflictos, que permite a las partes en disputa, una solución previa a lo que hubiera constituido un litigio. La mediación ofrece a las partes, una oportunidad de ganar una mayor comprensión de su conflicto, y limitar el coste (tanto en tiempo como en dinero) que implica un procedimiento legal completo, contemplando todas sus posibles instancias.
Esta es una nueva misión dentro del ámbito profesional de la arquitectura, la de mediar en aquellos conflictos específicos que están dentro de nuestro campo de acción. El arquitecto mediador, aparte de toda la formación obligatoria reglada por el Ministerio de Justicia que tiene la obligación de tener, aporta una experiencia profesional que ayudará a llegara al entendimiento de la forma más razonable posible, siempre bajo el principio de que en la mediación no hay ‘ganador y vencedor’, ya que el acuerdo es de consenso sin imposiciones.
La mediación ante un conflicto
¿Qué son los conflictos?
Normalmente hablamos como si fueran sinónimos de problemas y conflictos, vamos a describirlos muy brevemente para diferenciarlos:
problema: estado de tensión o malestar que surge entre dos personas o más, porque tienen los mismo o contrarios, intereses, a lo que no encuentran una solución compatible con igualdad entre ellos.
conflicto: una cuestión de difícil solución entre dos o más personas donde ambas tienen o creen tener la razón.
Los conflictos surgen y nos acompañan a lo largo de toda la vida, no hay que entenderlos siempre como algo negativo, ya que los conflictos pueden ser positivos.
Es muy importante identificarlos para poder solucionarlos.
¿Qué tipos de conflictos nos encontramos en el día a día?
Debemos tener en cuenta que existen diferentes tipos de conflictos dependiendo del contexto o la forma en que se manifiestan.
Conflictos latentes: son aquellos conflictos que existen pero las personas implicadas no son conscientes de ellos.
Conflictos explícitos o manifiestos: aquellos conflictos que son aparentes y reconocidos por las personas implicadas.
También podemos encontrar:
Conflictos intrapersonales: surgen en el interior de la persona, consigo misma, están relacionados con los valores que posee o con cuestiones personales y/o íntimas.
Conflictos interpersonales: aquellos que surgen entre dos personas por la intervención de una tercera persona, una idea o por el interés en un bien que los dos aspiran, es decir, por algo que los dos quieren.