Mediación penal
La mediación es una herramienta que puede ser muy útil en ámbitos cercanos al derecho. Tal es el caso de la mediación penal, que permite llegar a un acuerdo entre acusado y víctima para minimizar al máximo todos los daños posibles.
La mediación penal es un medio para la solución de conflictos entre el infractor y la víctima que se da de forma voluntaria bajo la promoción del juzgado y con la participación de un mediador especializado en este tipo de mediación. La mediación penal busca lograr un acuerdo que permita reparar el daño causado a la víctima, así como que el infractor asuma su responsabilidad.
Aunque en una primera instancia pueda pensarse, la mediación penal no sustituye al derecho procesal penal, es un complemento que busca facilitar el desarrollo del mismo, en algunos casos es posible llegar incluso a soluciones que no se podrían alcanzar con la aplicación del derecho procesal penal, ya que permite establecer una vía de comunicación entre la víctima y el acusado o presunto infractor.
En el proceso de mediación penal se presta atención especial a la víctima, esperando que el arrepentimiento y perdón del infractor le permita alcanzar un acuerdo que sea satisfactorio y pueda reparar el daño sufrido. Como proceso la mediación penal presenta las siguientes características:
- Es voluntario: ninguna de las partes está en la obligación de seguir el proceso desde el inicio hasta el final o llegar a un acuerdo, pueden abandonar la mediación en el momento que deseen.
- Es rápido y flexible: la mediación penal es flexible, ya que sigue procedimientos establecidos, el proceso se desarrolla en función de las necesidades y posibilidad de acuerdo entre las partes, por lo que generalmente se desarrolla de forma bastante rápida.
- Es gratuito y confidencial; la mediación penal es un proceso gratuito, ya que se desarrolla dentro del dentro de un proceso judicial, por lo que no supone costes adicionales. Además es un proceso confidencial, los temas tratados y acuerdos alcanzados no pueden ser utilizados posteriormente en el proceso judicial. Sin embargo, el acta final debe ser remitida al juez que lleva la causa.
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