Daños más comunes en fachadas de ladrillo
Las fachadas de ladrillo son una estructura muy común que cuenta con sus propias fortalezas y debilidades. Te contamos algunos de sus daños más comunes.
Aunque las fachadas de ladrillo son una cubierta ideal para la mayoría de edificaciones por ser sumamente resistentes a la lluvia, la humedad, la luz solar y los cambios de temperatura, lo cierto es que este tipo de revestimientos pueden presentar numerosos daños a lo largo del tiempo, estos son algunos de los ejemplos más frecuentes.
Grietas y fisuras
Sin lugar a dudas, uno de los daños más habituales presentados por las fachadas de ladrillo son las grietas y fisuras, las cuales son generalmente generadas por la acción de la lluvia y la luz solar, de la misma manera también pueden ser generadas por los movimientos del terreno así como también por cualquier golpe accidental.
Es importante mencionar que dichos daños no suelen perjudicar la estructura de la fachada, sin embargo pueden desmejorar significativamente su imagen al generar una apariencia descuidada, además son capaces de causar problemas de filtración a largo plazo si no son tratadas oportunamente.
Mala solidificación del mortero
Cabe destacar que el término mortero hace referencia a la mezcla de aglutinantes y materiales de origen mineral, para construir cualquier edificación, la cual resulta indispensable para la construcción de fachadas de ladrillos, por servir como el principal soporte estructural al mantener unidos todos los bloques.
No obstante, en algunas ocasiones el mortero presente en dichas fachadas suele solidificarse inadecuadamente, lo que puede disminuir significativamente su durabilidad, así como generar numerosos problemas de filtración, pero esto no es todo ya que también es una de las principales causas de la ruptura y agrietamiento prematuro del cemento.
Daños por tensión estructural
La tensión estructural también puede perjudicar notablemente a este tipo de construcciones, por generar un desgaste mucho mayor en los materiales, lo que genera que la edificación pierda su resistencia a lo largo del tiempo, sin importar el tipo de mantenimiento que se aplique a la estructura.
Al igual que la solidificación inadecuada del mortero los daños por tensión estructural, pueden causar el agrietamiento del cemento y la ruptura de algunas superficies, incluso en algunos casos dicho elemento puede causar el colapso de la edificación, al debilitar notablemente sus bases.
Cimentación inadecuada
Otro inconveniente que también puede perjudicar notablemente a las fachadas de ladrillo es la cimentación inadecuada, ya que este tipo de estructuras requiere de bases fuertes y resistentes a pesar de ser construcciones livianas, por este motivo es fundamental calcular adecuadamente la cantidad de concreto requerida para la obra.
Por nuestra parte, desde el Estudio de Arquitectura de Manuel Navarro, seguimos diseñando y construyendo proyectos innovadores. Recuerda, nos encontramos en Calle Victoria, 7, 2 i, 29012 Málaga. Arquitecto en Málaga.